III Lustros de AutoExilio

Un día como hoy, pero de hace 15 años también estaba en un aeropuerto. Pero a 11 mil kilómetros de aquí.

Un día como hoy, pero de hace 15 años era todo miedo, ansiedad, ganas, nervios, tristeza, alegría y expectativas.

Un día como hoy, pero de hace 15 años tenía 24 y hacía menos de dos meses que había defendido mi tesis de título y había conseguido mi premio, un pasaje a Europa.

Un día como hoy,  pero de hace 15 años estaba sentada en un aeropuerto esperando para irme a vivir donde había nacido mi yaya.

Un día como hoy, pero de hace 15 años me estaba despidiendo de mi familia y de mis amigos.

Un día como hoy, pero de hace 15 años algunos confiaban en que lo lograría.

Un día como hoy, pero de hace 15 años algunos no confiaban en que lo lograría. Otros, simplemente querían que volviera, cuando todavía no me había ido.

Un día como hoy, pero de hace 15 años empecé el camino que quería, sin tener claro qué era lo que quería, como siempre.

Un día como hoy, pero de hace 15 años empecé un camino con altos y bajos. Unos más altos, unos muy bajos.

Un día como hoy, pero de hace 15 años no me imaginaba que iba a ser la flamante habitante de El Limbo.

Un día como hoy, pero de hace 15 años no me imaginaba cuántos Trocitos iba a encontrar a este lado del charco.

Y aunque a veces cargo una pena muy negra, como la de un día como hoy, pero de hace 15 años, la mayor parte del tiempo me acompañan la alegría y las expectativas, como las de un día como hoy, pero de hace 15 años.

Un día como hoy, pero de hace 15 años mi vida cambió.

2 comentarios sobre “III Lustros de AutoExilio

  1. Tantos recuerdos se agolpan en mi mente de ese día, mucha tristeza e incertidumbre, sabes lo que siento y lo que pienso de ti, eres grande en todo el sentido de la palabra, estoy muy orgullosa de ti, te adoro mi vida

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario